Crónica de un viaje a Japón

Viajar a Japón es el sueño húmedo de muchos, ya sea por ser la cuna del frikismo, con impresionantes barrios a rebosar de ocio electrónico y manga, como por su rica cultura o sus hermosos parajes, aunque al ser un viaje largo y muy caro, muchos pueden verlo como algo difícil de cumplir. Pero, como todo en esta vida, si te mueves, puedes prepararte un viaje hecho a tu medida y por un precio bastante asequible, sobre todo si lo comparamos con los precios de algunas agencias, donde el viaje nos puede salir incluso tres veces más caro.
En este pequeño reportaje, contaré mi experiencia en el país del sol naciente, aparte de facilitar algunos consejos para abaratar el coste del viaje y recomendar algunos sitios que considero, de visita obligatoria. Espero que os guste.


¿Cómo preparar el viaje?

Esto puede llevar mucho tiempo, pero ya que uno no puede ir cada día a Japón, recomiendo mirarlo con especial atención. Lo primero de todo es decidir cuánto tiempo queremos estar en Japón, yo recomiendo, mínimo, unas 3 semanas si vamos a visitar bastantes cosas y no pensamos en quedarnos en las grandes ciudades. Es el tiempo que yo estuve y aun así, me dejé muchísimas cosas por ver, como el precioso norte del país.
Una vez decidido el tiempo que estaremos en Japón y las fechas en las que podemos ir (cuidado con los calurosos, agosto es realmente agotador, os encontrareis con una temperatura de unos 35º con una humedad altísima que hará que estéis sudando a los pocos minutos de salir de la ducha), lo primero es buscar el vuelo.

Y aquí viene el primer consejo para ahorrarnos un buen pellizco. Casi todas las agencias programan los vuelos con llegada a Narita, el aeropuerto más cercano a Tokyo y el más grande. Lo que ocurre es que no es nuestra única opción, nosotros por ejemplo, llegamos a Nagoya, otra ciudad bastante grande (pero ni con la mitad de encanto que Tokyo, todo sea dicho), que se encuentra a unas 2 horas con el tren bala de Tokyo. Gracias a elegir este destino, nos ahorramos unos 150-200€ por cabeza en los billetes, que quieras que no, ya es bastante dinero.

Lo siguiente sería elegir la compañía con la que viajar, destacan dos, una es la más famosa, Japan Air Lines y la otra es menos conocida, Finnair. Al final decidimos escoger Finnair, con lo que el billete nos salía unos 50-100€ más barato si la memoria no me falla. Mucha gente me habló maravillas de Japan Air Lines, con sus pantallas individuales con alguna película para ver e incluso juegos. Yo me conformaba con que nos pusieran un par de películas con Finnair, pero cuál fue mi sorpresa cuando me encontré un servicio excelente, con unas comidas bastante buenas y gratuitas, pantallas individuales donde podías jugar a divertidos juegos (incluido una especie de Trivial entre los pasajeros del avión), ver una enorme cantidad de películas, series, escuchar cd’s de música e incluso trastear con las cámaras exteriores del avión. La sensación final fue inmejorable, por lo que recomiendo mucho esta compañía de vuelos, es más barata y con unos servicios y atenciones excelentes.





Una vez tenemos los días que iremos y los billetes comprados, es hora de planificarse la ruta y decidir que sitios visitar. Esto ya es tremendamente personal de cada uno, ya que en Japón hay infinidad de sitios por visitar y cada uno tiene sus gustos. Me limitaré a dar un pequeño consejo: No os quedéis solo con el Japón de las grandes ciudades, visitar el Japón rural, perderos por las preciosas montañas de este, visitar pueblos perdidos con su estilo Japonés antiguo, bañaros en un Onsen (aguas termales naturales) al estilo tradicional, con los barreños de agua, dormir en un templo si os es posible…etc.


Para ayudaros con vuestra planificación, os recomiendo mucho esta fabulosa página web, Viaje a Japón, donde encontrareis información de muchos sitios, recomendaciones, fotos, e incluso un fantástico foro donde podréis pedir ayuda, y conocer los sitios más baratos donde dormir dividido por ciudades y pueblos.

Luego, para moveros es indispensable el Japan Rail Pass, un pase que puede parecer bastante caro, pero que te permite usar los trenes balas (excepto el Nozomi), muchos trenes normales e incluso algunos metros y buses, totalmente gratis. Si pensáis moveros mucho, es algo obligatorio, en la página que os he facilitado antes encontrareis más información sobre dónde comprarlo y sus precios.

Luego, para saber los horarios de los trenes, buses y metros, y poder planificar los viajes dentro del país antes de llegar, va realmente bien la página de Hyperdia.

Teniendo los billetes comprados y una vez se tenga claro los sitios para visitar y se hayan reservado las noches, lo más difícil ya ha pasado.

Los sitios que visitamos

Os dejo una pequeña selección de fotos con unos breves comentarios sobre algunos sitios que visitamos Albis y yo.

Yunomine Onsen

Precioso pueblo a unos 70 minutos de Shingu que destaca por sus Onsens naturales y su encanto rústico. Nos alojamos en Minsyuku Yamane, un sitio muy bonito, donde probamos la comida japonesa más típica (un poco dura, eso sí) y disfrutamos de una estancia sencillamente excelente, donde la familia que llevaba la casa nos ayudó en todo momento.












Osaka

Gran ciudad con mucho ambiente, muchas tiendas, centros comerciales inmensos y unas galerías para ir de compras muy recomendables. Mención especial al castillo de Osaka con sus jardines a rebosar de grillos.






Kyoto

Otra ciudad grande, aunque nosotros nos limitamos a hacer el camino de las puertas, es una caminata algo larga, pero merece mucho la pena. Destacar que algunas escenas de la película "La Casa de las dagas voladoras" se rodaron en este camino.






Beppu

Este pueblo costero supuso una pequeña decepción, ya que no era especialmente bonito y no tenía mucho por ver. No recomiendo mucho su visita, a no ser que se quiera visitar el pueblo de Yufuin, que nos encantó, con su aire artesanal y sus tiendecitas.
Beppu:





Yufuin:




Takayama

Precioso pueblecito al estilo más tradicional, con bastantes sitios que visitar y bonitas calles por las que perderse. Dormimos en un templo la mar de bonito y disfrutamos de unos días tranquilos y relajados.










Hiroshima

Recomiendo mucho visitar Hiroshima y su museo de la paz. Es una experiencia única y bastante dura, pero aun así, muy recomendable. No tenemos que taparnos los ojos con nuestros errores, más bien mirarlos a la cara y aprender de ellos e Hiroshima es un ejemplo de lo que NO tiene que volver a suceder.



Y si visitáis Hiroshima, también recomiendo coger el Ferry a Miyajima:










Tokyo

La gran ciudad, el paraíso friki y el terror para los bolsillos. Ir a Japón y no ir a Tokyo es un sacrilegio de proporciones bíblicas. Hay que perderse por las calles de esta ciudad, meterse en las tiendas, los metros, los bares y disfrutar del ambiente que desprenden sus calles y su gente.















Un poco de información sobre la cultura Japonesa y su gente

Lo primero que puede asustar de un viaje así es la diferencia de idioma y sí, es una barrera bastante grande, pero he de decir que ni Albis ni yo sabemos nada de japonés excepto el “Gracias”, “Hola” y “Adiós”. Y aunque ha habido momentos bastante difíciles (mención especial a un restaurante que fuimos que lo llevaban dos ancianas y lo pasamos realmente mal para hacernos entender), en general nos hemos defendido muy bien con nuestro chapurreo del inglés (aunque, en contra de lo que creía, muy poca gente habla inglés en Japón), las señas y los dibujitos (siempre llevaba a mano una libretita con un bolígrafo para hacerme entender a base de dibujos en casos de urgencia jeje).

Una vez en Japón, una cosa que seguro que os llama la atención es su limpieza, no veréis prácticamente ni un papel, ni una lata, ni un excremento ni nada que ensucie los suelos de Japón y lo más extraño es que tampoco veréis papeleras. Esto también se aplica a los lavabos, incluso los servicios que podemos encontrar en algunas caminatas de montaña están perfectamente limpios, vamos, casi lo mismo que aquí jeje.

Sobre la gente, solo decir que son extremadamente amables, es muy agradable encontrarte perdido en el metro y que la gente se te acerque para ayudarte e incluso te lleve a tu destino aunque les supongo desviarse de su ruta, lógicamente no todos son así, pero la inmensa mayoría de gente con la que nos hemos cruzado nos ha ayudado muchísimo (incluso nos han llevado en coche para acercarnos a un punto difícil de acceder). También es muy destacable el tema de los robos, que son prácticamente inexistentes. Es muy normal ir por la calle y encontrarse decenas de bicicletas en la acera sin atar. O que pierdas una maleta e incluso un portátil y, contra todo pronóstico, te los encuentres en Objetos Perdidos (casos verídicos que les ocurrieron a unos amigos míos).

Sobre la comida…ufff, jeje. Os encontrareis de todo, platos que pueden ser auténticas delicias (la de veces que comí buey con arroz y curri picante o Tempura) a otros que pueden asustarnos un poco a los occidentales, pero bueno, todo es cuestión de ir con la mente algo abierta y probar nuevas cosas, algunas no os gustarán, pero seguro que también encontrareis platos que os encantarán. Por cierto, si vais a probar los fideos instantáneos que se compran en el super, recomiendo los de la marca UFO, una auténtica delicia.












Y por último…las compras

Como el nombre del blog indica, me considero un poco-bastante-muy friki, aunque el manga y el anime no me apasionan, si que tengo una gran afición por el mundo de los videojuegos, disfruto de ellos con ganas y he vivido momentos muy buenos con este Hobby (junto con el mundo del Cine y la Literatura, otros Hobbies que también me encantan), y claro, viajar a Japón y no visitar el barrio electrónico de Akihabara en Tokyo era lo mismo que despertarse por la mañana y olvidarse de respirar para mí. Así que sabiendo que mi maleta iba a reventar en mi visita a Tokyo (es más, al final tuve que tirar mi maleta de mano que llevaba, comprarme la más grande que me permitía el aeropuerto y aun así tuve que dejar el 90% de la ropa que llevaba en Japón para poder hacer sitio a mis nuevas adquisiciones), decidimos visitar esta impresionante ciudad los últimos días para no ir tan cargados durante el viaje y aquí os dejo unas cuantas fotos de las cosillas que me traje junto con alguna cosilla más:

Por unos 4€, no podía dejarme esta pequeña joya del coleccionismo, de la cual hice un análisis hace poco.

La funda de Dragon Quest V que me compré para la DS junto con unos Stylus, también de Dragon Quest y el fantástico juego Rhythm Tengoku Gold.



Battle Fantasia de PS3, junto con un disco de Art-School, un divertido juego musical para DS y una preciosa DS Crimson Black que le regalé a Albis.

Una botellita de Sake, y un par de juegos de GBA, el Yoshi's Universal Gravitation y el Wario Ware Twisted (este último es realmente bueno, fue un gran compañero para los viajes en tren).

Unos cuantos juegos de PS3 y PSP y la banda sonora de la última película del estudio Ghibli, Ponyo on the Cliff by the Sea.

Una PSP de color blanco con su funda para mi cuñado.


Y aquí viene la joyita del viaje, siempre he tenido la espina de no tener una DreamCast, consola que considero de las mejores de la historia y claro, fue encontrarme una preciosa DreamCast Japonesa, con su logo naranja, perfectamente cuidada, sin problemas de velocidad como en las europeas, por unos 15€ y...jeje, Albis me la regaló con algunos juegos de los que se ven en la foto.
Mención especial al US Shenmue, una edición bastante difícil de conseguir de este juegazo que incluía los textos en inglés (la edición normal está íntegra en Japonés)


Aquí vemos la DreamCast ya conectada en mi casa, solo necesité un transformador de corriente que compré en Japón para hacerla funcionar.

Una buena manera de aguantar el mono hasta que salga el Street Fighter 4 para 360, PS3 y PC es...jugando al Street Fighter 4 jeje.


Aquí una pequeña cámara digital que me compré en Tokyo


Haciendo amigos xD


Y una bonita fuente de decoración que le traje a mi madre




Por último, os dejo la crónica que escribió Albis.